¿DEBERÍA HACERSE OBLIGATORIA LA VACUNACIÓN CONTRA EL COVID19?

 La situación de pandemia mundial que estamos viviendo en la actualidad, por el contagio del

COVID-19, y el hecho de que se hayan desarrollado varias vacunas que se han demostrado

eficaces, para una vez inyectadas en la población, detener la propagación del virus, ha

generado el debate sobre si la vacunación debería ser o no ser obligatoria para la población.

En España la vacunación no es obligatoria, ni las empresas tampoco pueden obligar a vacunar.

Pero cada Estado cuenta con una legislación específica en cuanto a vacunación, vacunas que

se ponen y cuales son o no imperativas su inyección.

Está demostrado que las vacunas constituyen uno de los mecanismos más eficaces para el

control de las enfermedades, pero es necesario constatar y transmitir a la población la

seguridad de las mismas para su inyección a nivel masivo en la población.

Si bien, las primeras reacciones de parte de la población era manifestar ciertas dudas sobre la

seguridad de la vacunación y sobre posibles efectos secundarios que se podrían generar, por la

rapidez en la obtención de la vacuna, con el transcurso de las primeras semanas, y después de

la puesta en marcha de la vacunación en la mayoría de los países, se ha hecho mayoritario el

convencimiento de la población de la necesidad de la inyección de la vacuna para el control de

la pandemia.

Como es una pandemia mundial, en mi opinión es mejor que tanto desde las instituciones

como desde los diferentes grupos de expertos de la salud, entre ellos la OMS, se informe sobre

los beneficios de la vacunación del covid, facilitando datos para que la población tome la

decisión LIBREMENTE, pensando en el beneficio global de la vacunación.

En la actualidad, la mayoría de la población ha interiorizado la idea de que la vacunación es la

única vía para detener la pandemia y tratar de volver a la normalidad de la vida que teníamos

antes de la aparición del virus. Después de este año se ha visto que no hay ninguna otra

alternativa para su control, por su rápido contagio, y la asimilación por parte de la población

de su necesidad, ha requerido tiempo y constatación de que los escasos efectos secundarios o

complicaciones que se están produciendo desde que se ha comenzado su implementación en

la población, es totalmente asumible, si comparamos con los beneficios que supondrá el hecho

de que haya una mayoría de la población vacunada.

Por lo que informan los expertos de la salud es necesario que un 60/70% de la población esté

vacunada para que se generen los beneficios de la inmunidad de grupo, por lo que cabría la

opción de que parte de la población no se vacunase si su conciencia o principios no se lo

permite. Por lo que se indica en las últimas encuestas realizadas a la población, existe una

mayoría con voluntad de ponerse la vacuna, por lo que el alcance del porcentaje necesario de

vacunación parece que se alcanzará, sin necesidad que se tenga que obligar a la población.